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A la estilista Raquel Trejo no solo le gusta la moda, la vive, crea y disfruta reinventándose en cada editorial o campaña.

La estilista de moda Raquel Trejo. Fotografía: Raquel Merino

Su historia no es la típica de llegar por casualidad, se lo curró y mucho. Periodismo por las mañanas, diseño de moda por las tarde y viajes diarios de su Valladolid natal a Madrid para hacer sus prácticas, nada menos que en Vogue.

Instagram es su herramienta principal para conectar con el sector e inspirarse siguiendo a firmas como Prada, Miu Miu, Ana Locking. “Hay que seguirles, son los primeros que se adelantan a las tendencias”. Campañas de ecommerce y editoriales de moda en Madrid,  New York, Dublín, le han dado la experiencia necesaria para vivir de su pasión, el estilismo. “Tras las prácticas en Vogue me fui a Dublín donde trabajé como estilista, es un mundo más pequeño y accedes sin necesidad de contactos. Después me fui a New York donde pasé casi tres meses. Allí la estilista es directora creativa casi siempre, a diferencia de lo que ocurre en España que está separado”, recuerda Trejo.

 

Estilismo de Raquel Trejo para Marie Claire Hong Kong.

Estilismo de Raquel Trejo para Schon Magazine

Tras unos años compaginando su trabajo de estilista con el periodismo, hoy se dedica por completo a un trabajo desconocido y sencillo a simple vista si pensamos que el estilista es quien elige y lleva la ropa a la sesión, pero nada más lejos de la realidad, ya que se trata de un proceso creativo que requiere de una concienzuda preparación. “Un estilismo depende de la localización o inspiración, que transmito con un moodboard que normalmente va por colores. Después lo comento con el fotógrafo, maquillaje, peluquería… todo el equipo”, comenta Trejo.

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Estilismo de Raquel Trejo para Jude Benhalim Jewelry

¿Sigues tendencias?.

Hay que seguirlas un poco en este trabajo, a veces en un shooting se te ocurre algo de repente que luego se sigue. Para un estilismo especial me gusta cambiar algo que no es el propósito que tiene, por ejemplo, una falda que sea vestido, accesorios, poses.. Hay ocasiones en la que la firma exige su política de full look, y tal cual sale en el desfile. Ahí no puedes ser creativo, se supone que tienes que respetar la visión del diseñador que es el que ha sido creativo.

 

¿Cómo es un día en tu trabajo?

Cuando hago una campaña como por ejemplo la que hice en París para una firma de calzado, tenía que hacer 60 looks y a parte hacía la producción: localizaciones desde aquí, modelos, organizar el timeline, hablar con el equipo. Los shooting se desarrollan en dos o tres días, el día de antes es de preparación para que el día del shooting salga todo perfecto.

 

¿Cuál es tu visión de la moda?

La moda es una forma de presentarte es lo primero que ves de una persona, es una forma de transmitir algo, y a mí me encanta la ropa. Hay otras estilista que acaban odiando ir de compras, a mi no me pasa, me sigue gustando todo el tema.

 

¿Qué le gustaría hacer como estilista?

Me encantaría hacer una campaña de alguna marca internacional, más grande, cuanto más presupuesto más libertad creativa. En este momento casi todas las marcas con las que trabajo son árabes, empecé con una en Egipto.

 

¿Qué diría a alguien que se quiere dedicar a esto?

 Le diría que es mejor asistir a un profesional antes que hacer un curso, sirven mucho más las prácticas. Yo suelo pasar algún trabajo al que no llego a mi asistente, y eso le da la posibilidad de adquirir experiencia, a  no ser que hablemos de un curso en NY de fotografía que garantiza estar en lo alto cuando salgas. O lo mejor o nada. 

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