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Leandro Cano

VALERIA CASTRO presenta su primer albúm que transmite desde ‘dentro’ hasta ‘la raíz’. Fotografías: Alba Yruela 

Valeria Castro, la artista palmera de tan solo 23 años, ha cautivado con su voz sensible, frágil y propicia para el escalofrío en ‘con cariño y con cuidado’. Su primer álbum que vio la luz el pasado 24 de marzo como una oda al aprendizaje, a la familia y a la madurez cargado de guiños y referencias a La Palma, la isla que vio crecer a la cantante.

‘Con cariño y con cuidado’ es ese álbum con hilo cronológico gestado desde la ternura y firmeza. Una radiografía del alma contada en primera persona. Un grito al mundo que conmueve, sacude y emociona hasta lo más profundo del corazón. Una recopilación sonora de sentimientos, de melodías y mensajes encapsulada, a través de 11 pequeñas píldoras en forma de canciones, que conforman el principio y final de un álbum que refleja, casi sin esmero, el nombre que ya le bautiza.

Fotografías: Alba Yruela 

Asimismo, la verdad y la realidad, se convierten en protagonistas de la historia personal de Valeria. Sucesos basados en aquel colosal impacto sobre el ánimo y el afecto que supuso constatar la voracidad implacable de unas lenguas de lava que agitaron al mundo  a lo largo de casi más de dos meses. Ríos de fuego que, entre miles de propiedades, engulleron también la casa centenaria de la familia materna de Castro, así como su creatividad tras una desgracia tan inverosímil. “No quería convertirme en foco de atención por una tragedia como la del volcán”, reflexiona ahora, “sino por mi música. Y no sabía bien cómo gestionar semejante barullo de emociones. Quería alzar mi voz sin privarle de ella a nadie”.

El “cariño y cuidado” de Valeria Castro recorrerá España y Latinoamérica a través de una extensa gira e inundará, hasta la raíz, escenarios emblemáticos como las Noches del BotánicoVida Festival, WOMAD y Pirineos Sur, entre otros. Las citas perfectas para disfrutar del talento y bondad en estado puro.

Valeria Castro

La jovencísima Valeria Castro es dueña de una voz sensible y frágil. Nacida hace 22 años en La Palma, la tercera de las hermanas Castro pertenece a esa generación novísima familiarizada con la terminología del trap, el reguetón o el perreo, pero su voz, en abierto contraste, se alza sabia, enraizada y antigua, como si proviniera de una mujer mayor y con el alma lacerada por los pesares de la vida. “No soy tan, tan vulnerable como mis canciones, pero me aproximo mucho como persona a esa misma vulnerabilidad. De lo contrario no podría ser cantante: me sentiría actriz. Y yo necesito que mi identidad y mi vida coincidan con lo que luego reflejo a través de la música”.

A punto de licenciarse en Biotecnología, la palmera confiesa que su plan de vida queda mucho más cerca de los escenarios que de los laboratorios. Con cuatro años comenzó a estudiar en la Escuela Insular de Música de La Palma. Un día de 2017 vio como sus redes enloquecían: Alejandro Sanz había compartido en Twitter uno de sus vídeos de versiones que acostumbraba a colgar, acompañado del texto «Cuando se unen talento y dulzura suceden cosas como ésta». A partir de ahí se inicia un camino que desemboca en su primer EP, titulado chiquita:  «Lo elegí porque así es como me siento, más que tímida soy una persona con miedos, a veces insegura, y con la música intento crecer, sentirme más grande, pero al ser el primer trabajo quería acercarlo a mis raíces», que le ha catapultado a ser a ojos de la crítica y la industria como una de las grandes promesas de la canción hispana. Letras sensibles cargadas de memoria y honestidad acompañan a un sonido impregnado de la herencia musical que teje lazos con la música folclórica de las islas canarias. En febrero del 22’  presentó por primera vez su show con banda en el Teatro Circo Price de Madrid con un rotundo éxito de crítica y taquilla.

 

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